Desde estas tierras más firmes os cuento que la operación caravana va viento en popa y parece que a finales de mes estaré por ahí con mi nueva casa.
He aprovechado la ruta Barcelona-Huelva para visitar a amigos que quedaron perdidos por la piel de toro.
De paso este Domingo me apunté a un triatlón sprint de pueblo en fiesta mayor. Esos de los que frecuentaba en mis años mozos.
El ambiente os lo podéis imaginar...tremendo. Por supuesto el alcohol acumulado en sangre del público ayudó mucho.
La natación espectacular en el río Pisuerga pasando por debajo del puente. Lástima no haber llevado traje. Los del pueblo decían: "El canario" (así me bautizaron al ver mi licencia) salió tiritando del agua.
La bici fue dura y un poco más larga y la carrera a pie un poco más corta lo que en condiciones normales me habría favorecido. Mi estado actual y el nivel que te encuentras hasta en el pueblo más pequeño de Castilla hicieron que mi puesto 20 me dejara satisfecho.
En fin mientras los nuestros daban la cara en el Casino yo hice lo mismo a 2000km.
Y ahora "on the road again" rumbo a Huelva para traer los trastos en el Ferry.
Nos vemos pronto. Mientras os dejo fotos del tramo de natación y del último pinchazo que tuve que reparar con mi minibomba.
